Crónica de un fin de semana imposible

Estoy muerto. Ah no, que sigo vivo... todavía.

El fin de semana empezó de forma inmejorable con una juerguecilla con 4 amigas impresionantes. Muy guapas las 4. Lo pasé genial. aunque me mataron con el calimocho y me duró la resaca el sábado hasta que empecé con el cacique con coca-cola por la noche.

Bueno, el viernes llegué un poco muerto a las 6. A las 12 me levanté y enseguida llegaron mis primos desde Madrid, porque por la tarde proyectaban nuestro corto en el X Festival Nacional de Cine Jovenes Realizadores.

Desde que llegaron no pararon de hacer el subnormal. Es que era increíble. No podían parar!! Tardamos como una hora en ponernos de acuerdo para irnos a comer, y como hablando a la cara era imposible, decidí llamar a Fernando al móvil, aunque estaba a 2 metros. Tras hablar 5 minutos, parece que la cosa funcionó. Menos mal, porque la ultima opción era mandarle un e-mail, y no tenía mucha confianza en que funcionara después de 100 e-mails esta semana sin sacar nada en claro...

Nos fuimos al Antilla a comer. De ahí sólo puedo decir que la camarera debe estar hoy en el diván del psiquiatra, y que probablemente le costará bastante superar el paso de los Alcalde por su curro. Es que Ramón solito la volvió loca.
Después fuimos a un hotel a descansar y tomar un café. Allí la que "se salió" fue Adriana, que tras hacernos buscar una habitación que no existía, la 116, intentó convencer al recepcionista de que ella había estado en esa habitación. Después de media hora de subir y bajar pisos, descubrimos que era la 816. Nada, solo 7 pisitos de diferencia... Pero no satisfecha del todo, Adriana, con el mismo ímpetu que había mostrado con el recepcionista intentando que reconociera la existencia de su habitación, decidió llamar a la 814 para después huir cual conejo de campo perseguido por tipo en calzones blancos. En fin.

Después al auditorio a soportar los cortos, porque la verdad es que fue un coñazo brutal. Sobre todo el primero. Yo tenía a mi lado a dos militares que tenían bastante interés en darle una paliza al director de "compresas y tabaco".
La distribuidora de "Paco el vampiro" dijo que "el suyo no era el típico corto de 4 amigos que se juntan con una cámara a hacer el tonto". La verdad es que nos sentó bastante mal, porque es precisamente lo que hacemos nosotros, y creo que con bastante más originalidad y sin medios, porque sólo las imágenes a 3D (Mátrix) que tenían en su corto cuestan una pasta. Puede que millón y medio de pesetas. Es un dato objetivo que nos hemos codeado con cortos con grandes subvenciones y/o productoras detrás, y que no tenemos nada que envidiarles. En la mitad de los casos todo lo contrario.

Luego unas fotos haciendo el idiota (empiezo a pensar que no sabemos hacer otra cosa), y a cenar al chino... había una mesita redonda giratoria que dio bastante juego. Después nos dió por cambiar la letra "l" por la "r". CReo que los chinos siguen preguntándose qué es eso del "fran". Estábamos todos muertos de cansancio, pero empezamos a beber y fuimos de menos a más. Estuvimos en la Morrisey y después en el Jekill, y ahí ya hubo unos bailoteos que dejaron pasmao al personal... Por cierto, una tia con camiseta blanca que estaba buení. Luego al Charro. Al final acabamos a las 6 comiendo canapés en mi casa gracias a San Francisco Javier después de que otro militar nos llamara maricones por irnos "pronto". Si es que hay cada hijo de perra suelto... Así va el ejército español...
El domingo Fernando amaneció moribundo, y se tuvo que quedar en casa a recuperarse mientras nosotros seguíamos dando rienda suelta a nuestra imbecilidad por la plaza del Pilar.

Sé que este post es algo surrealista en sí mismo, pero creo que no podía ser de otra manera después de este fin de semana...

Espero que disfrutaseis todos. Prometemos seguir juntandonos con una cámara a grabar cómo hacemos el idiota. Porque nosotros nunca hemos buscado ganar dinero, sino en primer lugar divertirnos, en segundo lugar divertir a nuestra familia y amigos, y en tercer lugar intentar divertir a gente desconocida. Creo que las dos primeras cosas las cumplimos con creces.

Ha sido bestial.