De Vuelta

Nunca me había dado tanta pereza volver a encender un móvil y un ordenador como esta mañana.

He llegado a las 6:00 AM en tren. Ya he logrado gestionar los 229 e-mails que tenía, y tengo la sensación de que no he ganado nada leyéndolos.

Mi experiencia ha sido tan bonita e intensa que me han parecido en general vacíos. Durante estas dos semanas, además de aprobar un examen por teléfono he descubierto la universalidad y diversidad que representa el Camino de Santiago.
He llorado de risa y de emoción
He sacrificado mi dolor para servir al otro
He compartido todo
He visto a Dios varias veces en paisajes, en personas, en detalles, en acciones, e incluso le he sentido dentro de mí guiándome y hablando por mi boca.
He sentido que mis capacidades crecían, que mis virtudes se multiplicaban, y que mis talentos llegaban un poco más lejos.
He sido tremendamente feliz

Ojalá todo el mundo pudiera pasar por esta experiencia y sentir lo que yo he sentido.
Puede que dentro de poco postee mi carta al Apóstol.
De momento, vacaciones y "pretemporada"