Ser buen político

Ya dije que iba a hablar de todo, así que voy a cambiar un poco de tercio y voy a hablar por una vez de política.

Hace unos días a Josep Piqué, presidente del PP de Cataluña, se le ocurrió decir que "Zaplana y Acebes representan el pasado". ¿Cual fue su error si es que lo hubo? Pues probablemente decir lo que pensaba sin "retocarlo" para que no quedara mal ante los dirigentes de su partido.
Por mi chapeu

Y yo me pregunto: ¿Cual es el problema? Si hasta los "Peperos" más ultraderechistas piensan que Acebes y Zaplana son unos carcas retrógrados de mucho cuidado.
Para mi estos dos personajes son el cáncer del PP. Cada cosa que dicen sólo se ve superada en grado de lamentabilidad por la siguiente.

-Qué os parece que ya hasta invento palabras nuevas!!!- ;)

Pero luego el político ambicioso y codicioso es el único que dice hasta dónde quiere llegar, el único que siempre da la cara y que ni en los peores momentos se amilana ni se esconde, es objetivamente, el representante más votado de España (por algo será):

Alberto Ruiz Gallardón

En la política todos son tiburones, todos son lobos que se muerden unos a otros. Todos excepto Gallardón, que es el único lobo que es mordido pero no muerde. Es un tio hábil en la improvisación, en la respuesta rápida a todo tipo de preguntas, sobre todo a esas preguntas que tocan los huevecillos y que tanto gustan desde el primer Caiga Quien Caiga. Pocas veces mete la pata. Siempre se desmarca de apoyar posturas con las que no está de acuerdo, fue de los primeros alcaldes del PP que se apresuró a decir que él no se negaría a casar homosexuales cuando su partido lo pregonaba a los cuatro vientos.

Todos los políticos son ambiciosos hasta la exageración pero todos van con la careta de la humildad, de la solidaridad, etc. La sinvergonzonería en política no conoce límites, y muy pocos son capaces de subir sin pisar a otros aun en la contradicción de que sean más válidos que ellos. Esto permite ver en cargos de responsabilidad crucial a gente como Celia Villalobos, Zaplana, nuestra "amigüita" Esperanza Aguirre (hay que ver cómo se pica porque Gallardón sea capaz de ponerse de acuerdo con la ministra de Fomento), Trujillo, Cristina Narbona, Carmen Calvo, etc. (cuya incompetencia flaco favor hace a que se vea de la misma forma a mujeres y a hombres, porque por desgracia, en este país a las mujeres con altos cargos se les sigue mirando con lupa).

A Pepe Blanco lo deben ver tan inútil en su propio partido que gracias a Dios no le han dado ministerio. Desde luego, cara de besugo tiene, aunque el asesor de imagen ha hecho un buen trabajo, sobre todo cambiándole las gafas.

Me sorprende muy gratamente que Gallardón, siendo tan ambicioso, (no ha negado que quiere ser presidente del Gobierno de España), nunca se ha bajado los pantalones ni lamido culos para ascender, al contrario por ejemplo que Zaplana, un tipo tan lameculos que los sigue lamiendo aun cuando su mentor está fuera del partido y de la política, un tipo cuya objetividad es nula, probablemente a causa de su poca personalidad y sus complejos, que no es capaz de reconocer ni errores propios ni méritos ajenos.

Que razón tienes Piqué, y que pena que en el orgullo de los partidos no quepa la autocrítica y te obligaran a rectificar o a retocar tu discruso para que no pareciera que habías dicho lo que dijiste, y aun peor que veas, al igual que mucha gente, que esos dos personajillos son el lastre que hará que el PP vuelva a perder las elecciones.

Curioso que los políticos más válidos como Piqué, Pimentel o Gallardón estén más fuera del PP que dentro. (Pimentel completamente fuera desde Irak)

Marín, el presidente del Congreso, es en mi opinión otro buen político, aunque alguna vez ha metido la pata.

Creo que si sólo pudieramos elegir a una persona para que nos representase, probablemente la mayoría de los españoles elegiríamos a Gallardón

Ojalá me equivoque, pero dudo que a Alberto le dejen optar a la presidencia. Sería demasiado fuerte para ellos ver cómo probablemente ganaría de calle, cómo probablemente demostraría que él tiene el apoyo de la mayoría en la teoría y también en la práctica.

Sería demasiado fuerte para todos sus "compañeros de profesión" ver cómo triunfa una persona honesta, competente, sincera, tolerante, abierta, y sobre todo permantentemente consciente de que gobierna para todos: para los que le han votado y para los que no.

Bastante les debe joder ya que tenga una gran amistad con un "rojazo" muy admirado como Joaquín Sabina, que por cierto le dijo a la cara ante millones de españoles lo que muchos pensamos:

Que debería hacer un partido de centro con José Bono. Fue en un programa de "Las cerezas" memorable.

Un poco ladrillo. Lo siento